DETRAS DE UN CLIENTE HAY UNA FAMILIA
Maria Ochoa nunca ha dejado de creer en sus capacidades a pesar de los percances que tuvo cuando llegó a este país. A lo largo de estos 15 años con su empresa OQBC Accounting Solutions Now, se ha logrado consolidar como una empresaria ejemplar, y esto lo ha conseguido gracias a su fortaleza, su familia, su equipo de trabajo y el dar lo mejor de sí con autenticidad.
- ¿Hace cuánto llegaste a los Estados Unidos y cómo fueron esos primeros años de transición en el ámbito empresarial ?
Llegué hace 24 años de Cali, Colombia, estaba recién casada de mi primer matrimonio, pero por más que lo teníamos planeado, siempre nos afectó la transición del cambio de país, el estilo de vida y las repercusiones en el ámbito personal y profesional, extrañaba la familia, los amigos, y sentía muchas limitaciones en mi desempeño profesional.
- ¿Cuáles fueron los retos que más recuerdas de aquella época ?
Uno de ellos fue mi divorcio, el casarme nuevamente y el ser madre de tres hijos, William, José y Emily; con ellos sentí uno de los mayores retos, estaba feliz por ser mamá, pero con una sensación de estar dividida entre mi rol de madre y mi gran pasión por mi carrera como profesional contable, pero me las ingenié e inicié mi oficina desde casa. Otro gran reto fue sobrevivir el cáncer en dos oportunidades, una experiencia que me dejó cicatrices físicas pero mucho aprendizaje y evolución espiritual.
- Para ti es muy importante estar educando a tus clientes continuamente, ¿por qué?
Debería ser uno de los propósitos de cualquier profesional o dueño de negocio, el de educar a sus clientes en aquello que vendemos, ya sean servicios o productos; es una responsabilidad proveerles información de valor, que permita a estos clientes adquirir más conocimiento y base para sus decisiones e incluso esta educación les aportará una mayor conciencia de causa y efecto de cada acción tomada en sus negocios.
- Más que una contadora das un servicio de asesoría completo y personalizado, ¿a qué te refieres con esto?
Mi enfoque como profesional contable es apoyar bien de cerca al empresario, guiarlo, y alertarlo de algo que a lo mejor el cliente no ve por estar en las actividades diarias de sus empresas; y esto lo logro con la frecuencia que me conecto con los clientes a través de mis diferentes opciones de servicios que ofrezco; cuando las cosas no van bien, allí también estoy para apoyarlos a que sientan menos frustración en esos momentos de reto financiero. Detrás de un cliente, hay una familia y esa familia es parte de mi comunidad.
- La importancia de dar y servir son pilares en tu vida, ¿con qué sociedades sin ánimo de lucro estás vinculada?
Como dueños tenemos una responsabilidad civil y eso incluye apoyar a la población vulnerable de nuestros alrededores. He apoyado a entidades sin ánimo de lucro tanto en Colombia como aquí en Estados Unidos, en especial aquellas que se relacionan con los niños y adolescentes como son: Fundamira USA Inc. Childrens Harbor, Big Brothers Fundación, y pertenezco a grupos de empresarios que también tienen actividades sociales como son: Ms. Esquire, Americas Community Center y recientemente me hice miembro del Club Rotario de Weston.
- ¿Qué consejos le darías a las personas acerca del manejo de sus negocios?
A los que ya son empresarios, pues los felicito por la valentía de tener su propia empresa, mantenerse activo requiere dedicación, nervios y fe en ellos mismos. Les recomiendo que dediquen unas horas de cada mes a la revisión de sus estados financieros porque allí verán en cierta forma el resultado de su gestión administrativa; también les sugiero que vayan de la mano de un presupuesto y que tomen decisiones basadas en la información financiera y no por emoción/impulso; también es importante que identifiquen sus mejores talentos y aprendan a delegar y que sean sinceros consigo mismos, si son realmente felices con su negocio, porque la pasión les ayudará a mantenerse en sus empresas.
- OQBC esta cumpliendo 15 años de aniversario, ¿cuál es el mayor aprendizaje que has tenido en estos años?
La perseverancia y la resiliencia han sido mis motores para todos los retos que llegan a la vida, en mi caso, adaptarme a este país, aprender un segundo idioma, afrontar un divorcio, sobrevivir a 2 cánceres, y nunca renunciar a mi sueño de ser empresaria. Hoy ya son 15 años con altos y bajos, pero con la certeza que seguiremos ayudando a muchos más empresarios y a sus familias.
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